sábado, 4 de mayo de 2013

El juego de la Falla




El juego de la Falla

La noche y el día han revelado su verdadera apariencia:
su condición de roca.

Yo escucho la noticia, compuesto de pájaro:
a lo lejos
se ha roto la muralla.

La noche y el día han revelado su verdadera apariencia:
su condición de roca.

Ya no hay espacio para el hombre;
si se ahoga en el eclipse la potencia del aire,
sólo una imagen
en el juego de la Falla.

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Imagen: La ausencia del tiempo por José Viera, 2004.

2 comentarios:

  1. A veces, una simple falla crea frontera. Mas el ser humano encuentra vida hasta en el subsuelo. El impulso a vivir nos empuja. Y aunque el día y la noche sean rocas, la tarde sigue siendo cálida, y merece la pena esperarla.

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    1. Me gusta ese impulso a vivir, yo también creo que es la única manera de estar en la falla. Y me gusta también lo que dices de la tarde, y de la espera; ese empeño en ver calidez donde (quizá) no la haya me parece que es precisamente el impulso del que hablas. Para mi la pregunta fundamental es si somos capaces de calentarnos aunque la tarde también sea roca (si es que lo es).

      Muchas gracias :)

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